Mi historia
Soy Diana Camacho, y estoy aquí para que logres disfrutar de una vida anti-inflamatoria
Existe un CLIC importante en la vida de las personas, y es cuando empezamos a entender el autocuidado como una necesidad física, emocional y mental.
A partir de allí es cuando logras liberarte de todo lo que te pesa y te impide vivir con la energía y la salud que quieres. Comprendes que el cambio solo depende de ti, y entonces pasas a la acción sin dudarlo.
Lo sé, porque yo misma lo he vivido. Por eso, quiero compartir contigo mi historia.
Durante mucho tiempo viví con el estrés como rutina
Trabajé en marketing durante 15 años, en empresas y multinacionales, al mismo tiempo que criaba a mis dos hijas. En estos años, entré en un nivel de exigencia tan alto que acabé olvidándome de mí.
Me gustaba mi trabajo, pero no me acaba de llenar. Acumulaba mucho estrés pero iba tan en modo automático que tuvo que ser el cuerpo el que me empezó a dar señales.
El cuerpo es tan sabio que te obliga a parar y que escuches sus mensajes
Entonces, empezaron las digestiones pesadas, el dolor abdominal después de las comidas, un cansancio extremo y mucha falta de energía.
Fui al médico, y allí me diagnosticaron hernia de hiato y piedras en la vesícula. Recuerdo salir de la consulta con la “etiqueta de enfermedad crónica” y con un recetario de pastillas que me negué a tomar.
En ese momento, me hice la pregunta que lo cambió todo:
"Diana, ¿cómo quieres verte en unos años"
Podía ser una mujer con una enfermedad crónica, el pastillero siempre en el bolso y visitas constantes al médico.
O, en cambio, podía aprender a cuidarme, para que mi cuerpo volviera al equilibrio natural que necesitaba.
Creo que no hace falta que te diga con qué opción me quedé, ¿verdad? 😉
Empecé a formarme en nutrición, con el objetivo de sanarme a mí misma y cuidar a mi familia
Cambié mi alimentación, y eso me llevó a transformar mi salud por completo.
Luego me formé en Naturopatía y así descubrí las plantas medicinales, las flores de bach, la aromaterapia, la suplementación…
Veía cómo se me abría un nuevo mundo delante, y quise seguir aprendiendo sobre meditación, mindfulness, Reiki, Hoponopono…
Aprender todas estas disciplinas desde la práctica me permitió descubrir que una Alimentación Antiinflamatoria y Terapéutica es la base para mantener un estado de salud óptimo y que la Madre Naturaleza nos regala todos los principios activos para sanarnos de una manera natural.
Comprendí, también, que las emociones tienen un papel fundamental en nuestra salud, y poco a poco me fui liberando de creencias, miedos, conflictos y resentimientos que cargaba como una mochila.
En un principio, emprendí este camino con el objetivo de mi auto sanación, del cuidado de mi familia y como parte de mi crecimiento personal.
Pero, hace 5 años, con mis hijas ya preadolescentes, comencé a ver que, en pocos años, ellas serían más independientes y ya no necesitarían tanta dedicación…
Entonces, reapareció mi mantra …
Me pregunté:
¿Cómo te gustaría verte a los 50 años?
Y la respuesta fue clara: quería poner todo mi conocimiento, aprendizaje y experiencia al servicio de la sociedad.
Así fue como nació Dianalavidasana, para que muchas más personas puedan disfrutar de una vida saludable, sintiéndose bien por dentro y fuera.
Me he formado en
Nutrición
Naturopatía
Alimentación terapéutica
Alimentación Antiinflamatoria
Cocina
Mindfulness
Reiki III y Hoponopono
Aromaterapia
Me he formado en
Nutrición
Naturopatía
Alimentación Antiinflamatoria
Alimentación terapéutica
Mindfulness
Cocina
Reiki III y Honoponono
Aromaterapia
Algunas cosas más sobre mí
Mi infancia en el huerto
Mi pasión por los alimentos saludables nace desde niña, cuando veraneaba en una pequeña población cerca de Barcelona, en Cardedeu, con mis padres y mis tíos, y teníamos un huerto.
¡Era una gozada cuando llegaba la hora de preparar la comida y tenías que ir al huerto a coger unos tomates, pepinos, pimientos de las ramas en su justo punto, para hacer una ensalada o unas judías verdes para cocerlas!
Los sabores, los olores y los colores de esos alimentos y el compartirlo con mis seres queridos son unos recuerdos muy felices de mi infancia.
