Todas sabemos lo molesto que puede llegar a ser la inflamación abdominal, y lo mal que nos hace sentir. Además, es una situación que puede causarnos muchos problemas de salud a la larga, y que, por tanto, no podemos obviar.
En blogs anteriores, ya hablamos de las principales causas de la inflamación abdominal, y dimos algunos tips para remediarla, como beber 2 litros de agua al día, controlar el estrés, o comer más despacio. Hoy ahondamos en cómo podemos solucionar la inflamación abdominal desde un punto de vista integral, enfocándonos en la alimentación y en los remedios naturales para que no tengamos que recurrir a medicamentos que pueden dañar y debilitar nuestro organismo si abusamos de ellos.
Los titulares de una alimentación antiinflamatoria
Una de las principales causas de la inflamación es una dieta pobre en fibra y carente de vitaminas y minerales. Por eso, si queremos evitar la hinchazón, uno de los remedios más efectivos y sostenibles en el tiempo es cambiar nuestra alimentación. Hay muchos alimentos que, además de estar (¡muy!) ricos, nos ayudarán a decir adiós a la inflamación. ¿Sabes cuáles son?
¡Omega3 al poder!
Seguro que te suena el Omega3… Miles de anuncios y productos lo utilizan como reclamo para vender más. Pero… ¿Sabes qué es realmente? El Omega 3 es, realmente, un ácido graso poliinsaturado. ¡Suenan las alarmas! Efectivamente, el Omega 3 es grasa, pero no es como la de las patatas fritas o los donuts, se trata de un componente que tiene muchos efectos buenos en nuestra salud. Necesitamos estas grasas para fortalecer las neuronas y para funciones celulares importantes. Además, estos ácidos ayudan a mantener el corazón sano y protegido contra problemas cerebrovascular. Algunos alimentos ricos en Omega 3 son:
- Las semillas van repletas de Omega 3. Hay mucha variedad, son fáciles de encontrar y las puedes usar en muchas recetas. Un ejemplo son las semillas de lino, o de chía, ambas muy saciantes, y considerados superalimentos. ¡Que no falten en tu cocina!
- El pescado azul como atún, boquerones, salmón o caballa son de los productos que más se asocian con el Omega 3. Ayudan a reducir los niveles de triglicéridos en sangre y disminuyen la presión arterial. Además… ¿A quién no le gusta un buen salmón a la plancha acompañado de verduritas?
- Los frutos secos son de los alimentos más versátiles: fáciles de comer y de llevar cómo snack. Nos aportan mucha energía de forma saludable y destacan por su contenido en Omega 3. Entre ellos, las nueces son las reinas de la Omega 3.
Frutas de bajo índice glucémico
Que las frutas deben estar presentes en toda dieta saludable no es ninguna novedad. Con múltiples vitaminas y minerales, son uno de los alimentos que no pueden faltar. Aun así, debemos recordar que las frutas contienen fructosa que, a pesar de ser saludable, es azúcar. Al tratarse de hidratos simples elevan nuestro nivel de índice glucémico en sangre. Aunque no es ningún problema (¡no demonicemos las frutas!) es recomendable regular el consumo y priorizar aquellas con un índice glucémico menor.
- Las fresas, frambuesas o arándanos tienen un contenido muy bajo en azúcar, teniendo un índice glucémico de entre 22 y 25. Además, tienen componentes antioxidantes que nos ayudan a depurar el organismo y previenen infecciones. ¡Aprovecha en primavera, que es temporada!
- El pomelo es perfecto para los amantes de los cítricos. Con solo un IG de 26 y rico en vitamina C, favorece la formación de colágeno y mejora el funcionamiento de nuestro sistema inmunológico.
- Las ciruelas tienen un índice glucémico de 35. Además, ayuda a reducir la retención de líquidos, y nos puede ayudar a mejorar nuestro tránsito intestinal, y combatir el estreñimiento.
- El limón puede servirnos de complemento para algunas recetas o para infusiones. Es rico en vitamina C, aumenta la absorción del hierro, ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares y mejora la digestión. ¡Lo tiene todo!
Suplementación de probióticos
La microbiota es uno de los ámbitos de estudio que más se está ahondando en los últimos años en el ámbito de la salud. ¡Y no es de extrañar! Todos esos bichitos que viven en nuestro intestino tienen una función fundamental en el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Por eso, es importante que la microbiota no presente alteraciones y, en caso de tenerlas, que la regeneremos.
Para regenerar nuestra microbiota, podemos recurrir a la suplementación de probióticos. Los suplementos de probióticos contienen microorganismos vivos que benefician a nuestro organismo y que, por tanto, aportan a la microbiota el equilibrio necesario.
Así, los probióticos se tratan de un remedio natural, apto y seguro para incluir en nuestra vida si nuestra microbiota está desregulada. Estos suplementos los podemos encontrar en cápsulas o píldoras, o bien en algunos alimentos fermentados como el Kéfir o el yogur entre otros.
Infusiones
Tomarse una infusión se asocia a un momento de relax, de parar un momento y beber con tranquilidad. Además de tener el componente relajante, hecho que también ayudará a reducir el estrés, encontramos algunas infusiones naturales que pueden reducir la inflamación abdominal. Entre las muchísimas opciones que podemos encontrar, podría ayudar:
- Infusiones de jengibre y limón
- Té de cúrcuma
- Infusiones de hinojo
- Infusión de canela
- Infusión de manzanilla
- Té verde
Si queremos reducir la inflamación abdominal es muy recomendable introducir los alimentos y suplementos que hemos comentado. Aun así, debemos tener en cuenta que debemos combinarlos con un estilo de vida saludable. Por eso, tan importante es tener una alimentación balanceada y rica en vitaminas, como saber gestionar el estrés y realizar ejercicio físico. En definitiva, construir hábitos saludables. ¿No sabes por dónde empezar? ¡Te puedo ayudar a dar el impulso que necesitas! Consulta mis servicios, y empieza a cambiar tu vida.